Reflexiones desde Rectoría: Este lote no se vende

Hace varios meses un grupo de estudiantes del Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid, pintó un letrero en un muro externo de la institución, sobre la avenida Las Vegas, que aún se mantienen ahí, que dice: “Este lote no se vende”; como una forma de protestar ante los anuncios de una modernización de nuestras instalaciones y del entorno que compartimos con la estación El Poblado del Metro. Nada más contundente que lo que afirma ese graffiti.

Todos los integrantes de la comunidad académica del “POLI” estamos totalmente de acuerdo. Estas instalaciones dedicadas desde hace más de 57 años a impartir educación superior pública de calidad, no están en venta, no se canjean y no se destinarán a la construcción de ningún centro comercial. Simplemente lo que queremos, es actualizar nuestros espacios, para que de una forma digna, a la altura de cualquier universidad de categoría, enfrentemos otros 57 años de retos, donde la educación gratuita sea el gran objetivo.

Para que todos esos sueños se hagan realidad, es necesario que contemos con los medios que nos permitan una sostenibilidad económica en el tiempo, dándonos más independencia de recursos públicos que a veces llegan y a veces no. Solo las mentes retorcidas o las oscuras intenciones de quienes manipulan con la desinformación o la tergiversación de los hechos, buscan que la obsolescencia de la infraestructura física del “POLI” cada vez sea mayor, para que sobre las vetustas estructuras puedan decir que nunca hubo gestión y que ellos son la salvación.

Hemos buscado aliarnos con el Metro como estructurador de este ambicioso proyecto, por la confianza que genera en nuestro medio esta empresa de transporte masivo, que ahora tiene la oportunidad de ser operador urbano. El rigor, la seriedad y el éxito del Metro en todas sus acciones, dan la confianza y tranquilidad para presentarle a la sociedad un nuevo polo de desarrollo académico, cultural y de movilidad, que se conocerá como la ciudadela educativa del sur, integrando en un futuro a nuestra institución con el INEM José Félix de Restrepo y la Universidad EAFIT.

Estamos pensando en un moderno edificio de servicios académicos y extensión, un edificio de posgrados y educación para el trabajo, un edificio de parqueaderos en altura, un centro de innovación, creatividad y servicios. Además un edificio de convenciones y la integración y modernización del edificio administrativo con la estación El Poblado del Metro, que en la actualidad mueve a más de 47 mil pasajeros por día.

Esta, que será por siempre una universidad pública al servicio de los ciudadanos de menores recursos del departamento, está en un lugar privilegiado y estratégico de Medellín. Es necesario ponerla a tono para que brinde seguridad, comodidad y dignidad a quienes decidan convertirla en su alma mater. Igualmente buscamos generar nuevos espacios públicos para convertirla en ágora de la ciudad. El filósofo español Miguel de Unamuno, afirmaba que: “He dicho alguna vez, con escándalo acaso de ciertos pedantes, que la verdadera universidad popular ha sido el café y la plaza pública.”

Me niego a pensar que son los jóvenes los que están en contra de la modernización del Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid, atendiendo infundios de quienes quieren hacer del caos y la desinformación su modus operandi, para mantenerse vigentes, no aportando ideas para construir el futuro, sino poniendo talanqueras para destruir el presente. La mayoría de nuestros estudiantes la tienen clara y ya lo han expresado desde hace muchos días. “Este lote no se vende.”

Estamos listos para socializar y explicar hasta la saciedad a todos los estamentos universitarios y a todo el que esté interesado, el propósito de este gigantesco proyecto, quizá el más importante después de la fundación del “POLI”. Honraremos la palabra y defenderemos los intereses que siempre han orientado a esta noble institución. Todos tenemos la obligación de cuidar el patrimonio del “POLI”, que es público, enfocado a las clases de menos recursos, con vocación tecnológica, con investigación aplicada y con programas de calidad pertinentes con las necesidades de un mundo globalizado.

Todo lo que estamos visionando busca alcanzar el gran objetivo de una educación para vivir mejor. El empresario inglés dueño de la marca Virgin, Richard Branson, ya lo decía: “Si tus sueños no te asustan, no son lo suficientemente grandes.”

Libardo Álvarez Loperaz
Rector